Esa hermosa imagen  viendo a tu bebé demostrando sus primeros intentos de caminar que te llenan de orgullo, esos son los indicios de que es hora de estimularlo a lograr esta grandiosa meta.  Recuerda cuando se esforzaba como una pequeña oruga para lograr gatear, esa alegría reflejada en su rosto de felicidad porque podía hacerlo, es ello lo que debes lograr de nuevo. Existen algunos ejercicios de estimulación temprana que benefician el aprendizaje de enderezarse y poder a caminar. Otros pequeños se sienten tan a gusto gateando que les cuesta un poco más empezar a andar.

Lo primero que debe saber es que la edad correcta para comenzar a caminar está estipulada entre los 12 a 18 meses de edad, antes de esta edad la musculatura de sus piernas aún no está desarrollada completamente y forzarlo a caminar  antes de esta edad causara deformaciones a largo plazo, si posee más edad y aun no intenta caminar debes llevarlo al pediatra. El bebé por si solo se sentirá estimulado a lograr caminar gracias a lo que ve en su entorno y casi siempre consigue caminar por sí solo, pero claro, es inevitable no querer ayudar a tu bebé y él esta dichoso de que las personas más importantes para él como son sus padres lo alienten y celebren sus logros.

Puedes optar por varios ejercicios prácticos como lo son caminadoras o un objeto similar casero, que lo divierta mientras aprenden y que no sea riesgoso. Colocar sus juguetes preferidos a ciertas alturas que él solo puede alcanzar colocándose de pie, le permitirá tener mejor resistencia en sus piernas y esforzarse por conseguir algo que quieren mucho. Debes tener en cuenta que es normal que él se caiga varías veces y no debes demostrar tu preocupación o nerviosismo porque le estas trasmitiendo inseguridad al bebé afectando su proceso. Los expertos recomiendan que debes estar allí alentando siempre, aplaudir y decirle “muy bien”, cuando logre dar unos pequeños pasos, si se cae asegúrate de que no sea peligroso y delo contrario no lo ayudes, déjalo que él solo se levante y siga intentando es parte de la independencia.

Una buena idea es tener a dos miembros de la familia alentándolo y poco a poco ir alargando la distancia, puedes agarrarlo de las dos manos primero y luego de una sola y empezar a caminar juntos lentamente y poco a poco aumentar la velocidad, no desaprovechar ninguna oportunidad, puede ser en la casa, en la calle, o incluso en un paseo, aprovecha cada momento. Cuidado con obligar a tu hijo, cada bebé es diferente y puede comenzar a la edad con la que mejor se sienta cómodo, si lo obligas se sentirá frustrado y no continuara.

Otra técnica conocida es del enseñarle abrir cajones, consigue una caja y utilizada para guardar los juguetes que de una altura que lo obligue colocarse de pie, implanta como rutina que él debe sacar y guardar los juguetes, se motivara a moverse aún más.