Durante el periodo de embarazo se presentan diferentes cambios de peso, mucho de ellos exabrupto que pueden colocar al bebé y la madre en peligro, ya sea por obesidad o desnutrición.

Embarazada-adapta-tu-dieta-segun-tus-molestias_articulo_landscape

Una correcta alimentación basada en equilibrio y aporte nutritivo adecuado es la diferencia. Recuerda que no es comer por dos, es comer para dos, este dicho es muy errado y común entre las mujeres, causando aumento de pesos excesivos colocando su vida en riesgo. Vale destacar que las mujeres embarazadas suelen refugiarse en sus antojos, aprovechándose de esto y consumiendo alimentos muy alejados de su dieta.

Una correcta alimentación va desde comer todo equitativamente, pero ello no implica que deben eliminar las grasar ni los carbohidratos, porque el bebé lo requiere como aporte energético para su crecimiento, la adición de ácido fólico permite el desarrollo de la columna vertebral, así como las destrezas motrices, la incorporación de suplementos vitamínicos, hierro, calcio y minerales es de gran importancia, aparte de la ingesta de alimentos ricos en ellos.

Lo siempre recomendable es solicitar ayuda de un nutricionista para determinar cuál es el alimento que se necesita en el organismo y cual está más elevado, aunque se tenga conocimientos sobre la alimentación es preciso contar con asesoría médica profecional.

El aumento de peso debe ser gradualmente controlado, es la mejor forma para evitar las detestables estrías, dolores musculares y óseos. Nunca debes hacer dietas durante el embarazo, ni utilizar fajas, porque esto provocara deformaciones en el bebé e inclusive aborto.

La dieta ideal para una mujer embarazada implica, consumir de 5 a 6 raciones de comida al día, aparte de las 3 fundamentales comidas que ya conocemos, debes consentirte con un refrigerio entre comidas, que puede ser una fruta, ensalada de verduras o de fruta, un pan con mermelada, una galleta o cualquier otro delicioso aperitivo. También es válido darse un regalo de vez en cuando con un helado o un postre, que no debe estar en tu dieta pero se vale si es esporádicamente, pero nunca te excedas en estos alimentos porque contienen alto nivel de azucares.

¡Ojo! Durante el embarazo no es excusa para descuidar tu figura, existen diversos métodos, desde aeróbicos como también el yoga que te permitirán mantener tu figura, esto debe comenzar antes de que quedes embaraza durante y después, siempre con un ritmo adecuado, dependiendo de cada etapa sucesivamente.

Prepara un menú junto con tu medico nutricionista o consulta con tu ginecólogo, que necesitas y que debes bajar la cantidad, un desayuno con carbohidratos altos, jugos cítricos, lácteos y una ración de frutas será ideal, en el almuerzo puedes incluir raciones altas de verduras, carnes, legumbres, incluye pescados, almidones, pavos y sopas o cremas. Durante la tarde raciones pequeñas de aperitivos o refrigerios; en la noche procura comidas suaves con un té caliente, para que te relajes y puedas conciliar el sueño más rápido. Duerme siempre ocho horas y durante el día puedes alternar horario de sientas con un tiempo de 30 minutos.