Una de las principales preocupaciones de todos los papás y mamás cuando se acerca el momento en que su pequeño comience a gatear, es la de preparar su casa para crear un ambiente menos peligroso para bebés. No queremos que por un descuido, nuestro bebé se lastime o sufra un accidente.
Cuando tienes un bebé que empieza a gatear o un niño pequeño hay muchos detalles en qué pensar, especialmente si eres padre primerizo. Por eso, he armado esta guía asegurándome de repasar cada una de las habitaciones en las que tu pequeño pasará tiempo y en base a ello te doy los mejores consejos para convertir estos espacios en áreas a prueba de niños y te recomiendo también los mejores productos de seguridad que puedes instalar en cada sección de tu hogar.
Antes de comenzar, quisiera hacer hincapié en que la mejor técnica de seguridad sigue y seguirá siendo siempre la supervisión. Por favor nunca descuides a tu bebé por dar un exceso de confianza a medidas de seguridad que nunca van a suplir el rol de un papá.
¿Cuándo debo empezar a preparar la casa para hacerla más segura para mi bebé?
Los bebés empiezan a gatear en promedio a los 8 meses, pero no es nada inusual que comiencen desde los 7 meses o incluso antes y hasta los 10 meses. Sin embargo, no es recomendable esperarte hasta que empiece a gatear para que tú hagas los cambios pertinentes en tu hogar. Cada día que tu bebé tiene movilidad en una casa no asegurada, es un día que estás facilitando un ambiente propenso a accidentes que pudiste haber prevenido.
En pocas palabras, si tu bebé ya cumplió 5 meses, es buen momento para comenzar a preparar tu casa.
Seguridad en la cocina
Estoy dedicando una sección especial a la cocina ya que ésta es un área central en el hogar y solemos pasar gran parte del día en ella. Aquí se comparten momentos inolvidables y exquisitas comidas, pero también es uno de los lugares con más peligros para los niños. Toma las siguientes consideraciones para hacer de tu cocina un lugar a prueba de niños pequeños y bebés:
Electrodomésticos: haz espacio en tu cocina, de modo que puedas guardar todos los electrodomésticos dentro de los gabinetes cuando no estén en uso. Lo último que quieres es que tu hijo jalonee el cable de la cafetera o licuadora ya que puede correr el riesgo de lastimarse.
Gabinetes: inspecciona detalladamente todo lo que tienes en tus gabinetes de cocina y considera eliminar cualquier producto químico o al menos colocarlo en un lugar inalcanzable para tus niños. Sustancias que utilizas en la cocina pero que representan un riesgo si tu pequeño las ingiere (sal, extracto de vainilla, salsas, vitaminas, etc.) también deben ir en los gabinetes más altos.
Además, te recomiendo utilizar seguros para gabinete, que te ayudarán a mantenerlo cerrado ya que están diseñados especialmente para que un bebé no pueda abrirlo… y recuerda, aunque son muy seguros, nunca te fíes al 100% de ellos; no guardes nada peligroso como cuchillos o químicos en gabinetes que tu pequeño pueda alcanzar.
Cuidado con el fuego: utiliza siempre los quemadores traseros de tu estufa ya que los de enfrente son los que tu niño más fácil puede alcanzar. También así hay menos riesgos en caso de algún derrame o salpicadura. Es recomendable instalar protectores para las perillas de la estufa o si tu estufa lo permite, puedes retirar las perillas cuando no estén en uso.
Vajilla y filos: como regla, toda la cristalería, porcelana o aquello que tenga filo (cuchillos, tijeras, procesadores de alimentos), debe guardarse en lo alto y en gabinete cerrado con seguridad.
Refrigerador: utiliza un seguro como este para mantener la puerta cerrada y que tu pequeña no la pueda abrir. También es importante que revises los imanes que tienes pegados a la puerta del refrigerador y retirar cualquier pieza que sea pequeña ya que es un peligro de asfixia.
Truco para el bebé explorador: puedes dejar un gabinete sin seguro para que tu bebé pueda explorar lo que hay dentro. El truco está en elegir el gabinete más alejado de la estufa/horno y colocar dentro solo cosas de plástico y que sean seguras para tu bebé.
Nunca lo hagas: jamás cargues cosas calientes y a tu bebé al mismo tiempo. Evita dejar bebidas o alimentos calientes en las orillas de la mesa o barra de cocina. No cargues a tu peque mientras estás usando la estufa o cortando alimentos con cuchillos.
Manteles de mesa: a los bebés les encanta jalar los manteles, tirando consigo platos, vasos y cuchillos filosos. Use manteles individuales en su lugar.
Seguridad en el baño
El baño es otro de los lugares con más peligros potenciales que hay en la casa. Toma nota de los siguientes puntos para prevenir accidentes en el baño:
Escusado: un curioso vistazo al escusado podría llevar a tu bebé a irse de cabeza poniendo en riesgo su vida. Instala un seguro para inodoro que ayudará a prevenir que tu bebé pueda abrirlo sin tu consentimiento.
Objetos peligrosos: coloca rastrillos, tijeras, cortaúñas, pinzas y otros utensilios afilados en un gabinete asegurado o en un cajón que esté fuera del alcance de tu bebé.
Aparatos eléctricos: desconecta la secadora de pelo, rizador, plancha de cabello y cualquier otro aparato que genere calor y/o utilice electricidad. Guárdalos después de cada uso para evitar quemaduras.
Cosméticos y medicamentos: ponlos todos fuera del alcance de tu pequeño para evitar una ingesta indebida.
En la bañera: jamás dejes a tu bebé desatendido en la bañera ni por un tiempo mínimo; en tan solo una pulgada (2.54cm) de agua se puede ahogar un bebé. Si suena el teléfono o tocan la puerta, mejor envuélvelo en una toalla y llévalo contigo.
Seguridad alrededor de toda la casa
Las siguientes recomendaciones hay que tomarlas en cuenta alrededor de toda la casa:
Toda esquina representa peligro: repasa detenidamente toda tu casa buscando muebles y espacios con esquinas filosas. Una vez detectadas todas las áreas puntiagudas en la casa, coloca un protector diseñado para suavisar los golpes. Instala cuantos esquineros sean necesarios para prevenir accidentes. Presta especial atención a las mesas de centro, ya que son las más propensas a accidentes.
Plantas: es importante verificar la toxicidad de las especies de plantas que tienes en tu casa para asegurarte de que tu pequeño no va a pasarla mal si come algunas hojas o pétalos en un descuido.
Decoración: pon especial atención a elementos decorativos tales como jarrones de vidrio, estatuas, portarretratos, lámparas y espejos. Intenta reemplazarlos por elementos decorativos menos peligrosos y más livianos. Si realmente necesitas exhibir el jarrón de la abuela, asegúrate de ponerlo suficientemente alto.
Puertas y ventanas: Las ventanas pueden ser un peligro si tu bebé las logra trepar (¡especialmente si están en el segundo piso!). Es por ello que hay que asegurarnos de instalar cierres de seguridad en las ventanas que no permite que abra más de 10 cm. Mueve todo aquel objeto que tu bebé pudiera utilizar como escalón para trepar hacia la ventana
Todas las puertas representan un peligro para las manitas de tu bebé. Puedes colocar protectores anti-machucones, que son pequeños topes de hule que evitarán que la puerta se cierre por completo, previniendo así un accidente tras un azotón de puerta.
Enchufes eléctricos: es necesario que todos aquellos tomacorrientes que no estén en uso sean cubiertos con una tapa plástica de seguridad para evitar que tu pequeño se electrocute introduciendo sus pequeños deditos (que pueden estar húmedos de saliva) o algún objeto conductor de electricidad.
Cajones: los cajones alrededor de la casa representan un riesgo no solo para machucones, sino que también puede salirse por completo y caer encima a tu bebé. El más intrépido no dudará en utilizar los cajones para escalar y esto puede provocar que el mueble se venga encima… por ello, asegúrate siempre de mantener los cajones cerrados con algun cerrojo como este.
Cables: un curioso bebé no dudará en masticar o jalar los cables, poniendo en riesgo que caigan lámparas u otros objetos pesados sobre su cabeza. Mueve y enrolla todos los cables para que queden fuera del alcance de tu hijo. Puedes utilizar una tapa como esta para enrrollar y cubrir los cables, solo asegúrate de verificar que es compatible con tu tipo de tomacorriente antes de comprarlo.
Muebles: estanterías, libreros, jugueteros de madera, la televisión y algunas mesas pueden representar un riesgo para los niños. Tómate el tiempo de revisar uno por uno cada mueble de tu casa. Dale pequeños tirones (simulando lo que haría tu bebé) para que puedas ver el potencial riesgo que representa cada mueble y asegurarte de que no se le va a venir encima. Atornilla donde sea necesario, repara muebles tambaleantes y busca la manera de fijarlos a la pared o al suelo.
Adicionalmente, asegúrate de colocar siempre los objetos más pesados en los cajones y estantes más bajos, de este modo la distribución del peso (más peso abajo y menos peso arriba) hará menos peligroso este mueble.
Escaleras: instala barreras de seguridad al inicio y al final de tus escaleras, así como en habitaciones prohibidas. Instala en la parte superior de la escalera una barrera como esta, ya que va atornillada a la pared y eso las hace mucho más seguras que las que cierran a presión. Puedes instalar la barrera inferior en el segundo escalón para que tu pequeño pueda practicar de forma controlada y supervisada la subida del primer escalón. Procura instalar una barrera que te sea fácil de abrir y cerrar, de lo contrario te verás más tentada a dejarla abierta cuando andes a las carreras.
Cortinas y persianas: los cordones que controlan la apertura de tus cortinas pueden representar un riesgo de estrangulamiento. Asegúrate de mantenerlos recogidos en todo momento (hay productos diseñados específicamente para ello) o dentro de lo posible buscar instalar persianas que no utilicen cable. Ya que andas por ahí, asegúrate de que el cortinero esté bien fijado a la pared para evitar que se caiga de un jalón.
Visitantes: sin malas intenciones, tus visitas pueden traer algo en su bolso que de dejarse al alcance de tu bebé representaría un peligro (por ejemplo, unas pastillas o un lápiz labial), por lo que siempre es buena idea tener un lugar asignado para poner sus cosas.
Concluyendo
Aunque prefiero escribir de lo bonito que trae consigo la maternidad y paternidad, es importante también discutir sobre los potenciales riesgos que hay y cómo prevenirlos.
No dudes en dejar tus comentarios y si crees que algo se me escapó, por favor ¡házmelo saber!
Disfruta mucho de la nueva etapa que estás por iniciar con tu bebé. Espero que esta guía te haya sido útil.
Mi bebé tiene ya 6 meses y me sentía perdida entre tantas cosas que veo en la casa que pueden ser peligrosas… Esta lista me ayudó muchísimo as poner en orden mis ideas y comenzar a prepararme!